En un inusual giro de eventos, Pedro Sánchez y Carles Puigdemont se mantuvieron alejados en un pacto silencioso, evitando cualquier encuentro público que pudiera dar lugar a especulaciones. Sin embargo, ¿cuál fue la razón detrás de esta evasión? ¿Por qué el presidente negó cualquier gesto de acercamiento hacia un colega progresista como el president Puigdemont?

Una Familia Progresista-Separatista

En medio de la política española, la familia progresista-separatista ha ganado un nuevo territorio en su lucha contra el fascismo. La reciente elección de Bildu en Pamplona, con el respaldo del Partido Socialista, ha marcado un hito en esta alianza progresista-separatista. Este acuerdo ha cuestionado un compromiso histórico del socialismo español: no facilitar el acceso al poder de Bildu hasta que asumieran la responsabilidad de su vinculación con el terrorismo etarra.

El Cambio de Rumbo del PSOE

Sin embargo, este compromiso se ha roto, y el PSOE ha contribuido al ascenso de Bildu en Pamplona. Esta decisión ha llevado a un replanteamiento de la posición del PSOE respecto a Bildu, antes considerado un socio incómodo. El partido ha dejado de lado sus preocupaciones éticas y se ha aliado con los separatistas en nombre del progresismo.

Los Conflictos de Interés

La política navarra ha presenciado una alianza entre el PSOE y Bildu, una coalición que busca la independencia de Navarra y el País Vasco de España. Esto plantea cuestionamientos sobre la política de redistribución de la riqueza entre regiones españolas menos pudientes y las más ricas. La alianza ha roto líneas rojas que anteriormente se consideraban infranqueables.

La Postura de Eneko Andueza

Eneko Andueza, líder del socialismo vasco, se ha distanciado de Bildu y ha reafirmado que nunca se aliaría con ellos para gobernar Euskadi. Esto plantea una contradicción: ¿por qué los pamploneses pueden ser gobernados por Bildu mientras que los vascos no pueden aceptar al ingeniero apoyado por Otegi?

La Doctrina Europea de Pedro Sánchez

Pedro Sánchez ha llevado el debate a un nivel europeo al argumentar que Vox representa una amenaza comparable al Tercer Reich en España. Esta retórica ha llamado la atención en Europa y ha elevado el debate doméstico a la escena europea. La narrativa de que los europeos buenos son de izquierda y los malos de derecha ha resonado en la política española.

El Papel de Weber

Manfred Weber, líder del Partido Popular Europeo, se ha convertido en el nuevo líder de la oposición a Sánchez en Europa. Sus críticas a la amnistía propuesta por Sánchez han tenido eco en la Eurocámara. Weber representa una oposición europea que considera a Sánchez como un agente de división y que valora los acuerdos entre socialdemócratas y conservadores como esenciales para el funcionamiento de la Unión Europea.

Divergencias en la UE

La percepción de Sánchez como un agente de división en Europa plantea desafíos para su imagen en la escena internacional. La Unión Europea se basa en acuerdos entre diferentes corrientes políticas, y la mayoría de los gobiernos europeos son de centro y derecha. La retórica de Sánchez sobre la división entre los europeos buenos y malos genera controversia y cuestionamientos en Europa.

En resumen, el reciente acuerdo entre el PSOE y Bildu en Pamplona ha desencadenado debates políticos en España y Europa. La ruptura de compromisos históricos y las contradicciones en la política del PSOE han llevado a una nueva dinámica en la escena política española. Además, las críticas de líderes europeos como Weber han elevado el debate a nivel internacional, planteando preguntas sobre la posición de Sánchez en Europa y su enfoque en la política progresista.